Se recomienda también leer el artículo Aceites esenciales.
«La esencia de la cáscara de naranja junto con pachuli relaja los músculos viscerales, y junto con hinojo si hay muchos gases», según Romera Figueroa, ayuda en el estreñimiento crónico o en la predisposición a las cistitis repetitivas: «Fortalece la vejiga, el tono muscular y la fuerza de una víscera, tonifica el organismo en general, en depresiones invernales es útil para quien no soporta el invierno, que le deprime».
Junto con bergamota («Gran antidepresivo que estimula la vitalidad de la persona») ayuda a liberar tensiones en el estrés y estabiliza.
Es un gran regulador en casos de una excesiva sudoración, menopausia, pubertad.
En las cicatrices viejas, de operaciones o de heridas punzantes, una aplicación sistemática de una o dos veces al día durante varios meses de la esencia de la cáscara de naranja en dilución concentrada y en una base de rosa mosqueta: «Primero suaviza y después va borrando la cicatriz y regenerando la piel».
(publicado en Conocer Arganzuela 139, julio/agosto de 2004)