El amaranto constituye una muy buena alternativa de cultivo en Argentina —especialmente en la zona semiárida— porque no tiene grandes requerimientos de agua; su alto valor nutritivo lo convierte en una herramienta fundamental en la lucha contra la desnutrición y, por ser un producto que muestra una creciente demanda internacional, posibilitaría frenar el constante aumento de la producción sojera[[Con relación a la soja transgénica, merece la pena leer Efecto bumerán en Monsanto: cómo el amaranto se ha revelado, en Estados Unidos al menos, enemigo frontal y mortal que obliga a arrancarla manualmente.]].
Cualquier estímulo puede desencadenar nuestra curiosidad y embarcarnos en una investigación periodística. Mi interés por los amarantos se despertó casualmente, mientras hacía un viaje de larga distancia, cuando la azafata del micro distribuyó algunos comestibles con el fin de hacer más llevadero el trayecto.
Como había mucho tiempo y muy poco para hacer, comencé a leer atentamente el envase de una barra de cereales con gusto a frutilla que venía de postre. En un ángulo, en medio de un pequeño rectángulo rojo se destacaba la palabra Nueva, y un poco más abajo se veía la frase: “Con Amaranto [[Amaranto
El amaranto pertenece a la familia de las amaranthacea y al género Amaranthus, su nombre científico es Amaranthus Spp. Es una planta de cultivo anual que puede alcanzar de 0,5 a 3m de altura, posee hojas anchas y abundantes de color brillante, espigas y flores púrpuras, naranjas, rojas y doradas. La familia Amaranthaceae reúne cerca de 60 géneros y más de 800 especies cuyas características cambian notablemente según el ambiente en el que crecen, lo que dificulta su identificación. Existen 3 especies de amaranto que producen semilla y son las más apreciadas: Amaranthus Caudatus (se cultiva en la región de Los Andes y se comercializa como planta de ornato en Europa y Norteamérica), Amaranthus Cruentus (originaria de México y Centroamérica, donde se cultiva para obtener grano y se consume como vegetal) y Amaranthus Hipochondriacus (procedente del centro de México, se cultiva para obtener grano). La planta tiene una panícula o panoja parecida al sorgo con una longitud promedio de 50cm a 1m. Esta panoja formada por muchas espigas que contienen numerosas florecitas pequeñas, que alojan a una pequeña semilla cuyo diámetro varía entre 0,9 y 1,7 mm, es el principal producto de la planta, con la que se elaboran cereales, harinas, dulces, etc. El ciclo vegetativo tiene un promedio de 180 días, desde que germina hasta que la semilla alcanza su madurez. Históricamente, el origen de la planta se ha ubicado en Centro y Norteamérica (México y Guatemala) y Sudamérica (Perú y Ecuador). Junto con el maíz, el fríjol y la chía, el amaranto fue uno de los principales productos para la alimentación de las culturas precolombinas de América. Para los mayas, aztecas e incas fue la principal fuente de proteínas y se consumía como verdura y grano reventado. Además estuvo asociado a los ritos religiosos, a los dioses y a la visión cósmica de estas culturas. Con la llegada de los españoles a América y durante la Conquista, el amaranto fue eliminado de la dieta indígena por razones religiosas y políticas. La cultura de su cultivo y consumo casi desaparecen, solamente en los lugares más apartados de la conquista española se mantuvo la producción. En la actualidad las zonas de producción y cultivo son las mismas de la época precolombina. Puebla es el mayor productor en México con un 51% de la producción total nacional. Le sigue Morelos, Tlaxcala, el Distrito Federal, el estado de México y Guanajuato. Se consume principalmente como cereal reventado o grano de amaranto, del cual se elaboran varios productos finales (alegrías, granolas, tamales, atoles, pinole, mazapán, harinas …). También se obtienen otros productos elaborados o industrializados como cereales enriquecidos, tortillas, galletas, panqués, horchata, bebidas chocolatadas, hojuelas, harinas, concentrados, extruidos, almidones, aceites y colorantes derivados; éstos a su vez sirven como insumos para otras industrias de alimentos y bebidas para elaborar productos de amaranto, o bien como materia prima de sectores industriales (químico, cosmetología, farmacéutica, …). Se conoce a la planta como la “planta inmarcesible”, que no se marchita, pero según la región, país o presentación del producto (planta o dulce) recibe otros nombres: “huatli”, “bledo”, “alegría”. Propiedades nutritivas: el amaranto es el producto de origen vegetal más completo, es una de las fuentes más importante de proteínas, minerales y vitaminas naturales (A, B, C, B1, B2, B3) además de ácido fólico, niacina, calcio, hierro y fósforo; con altísima presencia de aminoácidos como la lisina. La cantidad de proteína de la semilla de Alegría es mayor que la de los cereales. Contiene el doble de proteína que el maíz y el arroz, y de 60 a 80% más que el trigo. El amaranto se puede utilizar integralmente como un recurso para proporcionar a la población los requerimientos proteicos y de calorías, que en la actualidad se obtiene tan sólo de 20 especies vegetales como el trigo, arroz, mijo, sorgo, papa, fríjol, soya, azúcar, etc. Un estudio realizado, en 1975, por la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos para conocer vegetales poco explotados pero con gran potencial, demostró que el amaranto es uno de los 36 cultivos más prometedores del mundo, por lo que esa academia lo describió como «El mejor alimento de origen vegetal para consumo humano«. Usos medicinales: desde tiempos prehispánicos se ha aprovechado la planta: las hojas se utilizaron para infusión contra la diarrea no sólo por su valor nutritivo, también por las propiedades médicas que se le atribuyen y se han confirmado con las investigaciones realizadas durante los últimos años, que demostraron que una gelatina con alto contenido de fibra, elaborada con base de amaranto, nopal y harina de brócoli, podría prevenir el cáncer de colon. Por sus propiedades nutritivas y componentes (proteínas, vitaminas, minerales, aminoácidos, fibra y grasas) se recomienda para prevenir y ayudar a curar osteoporosis, diabetes mellitus, obesidad, hipertensión arterial, estreñimiento y diverticulosis, insuficiencia renal crónica, insuficiencia y encefalopatía hepática, es alimento apto para celíacos y personas con autismo. Se recomienda a pacientes con problemas bucodentomaxilares, geriátricos, desnutridos y oncológicos, en dietas hiperenergéticas e hiperproteícas; hipocolesterolemiante. Por su contenido energético también es beneficioso para pacientes con requerimientos calóricos elevados. Es una planta que puede aprovecharse integralmente, tiene múltiples usos, aplicaciones y subproductos: Verdura (de ésta se obtienen las hojas para sopas y ensaladas), Planta de ornato (para la elaboración de arreglos florales), Grano (se destina para semilla, germinados, cereales, harinas e insumos industriales) y Esquilmo (para obtener forrajes para animales, abonos para los cultivos y camas para los cultivos de vivero).
– Fuente: Amarantum Asociación Mexicana del Amaranto.]] & Semillas de Chía”.
Con poca luz y en movimiento, no era mucho más lo que podía leer durante el viaje, por lo tanto decidí guardar prolijamente el envoltorio de la golosina para analizar después sus componentes y valores nutricionales.
Mis obligaciones cotidianas hicieron que rápidamente olvidara el episodio, y el envase de la barra de cereales quedó arrugado en el bolsillo de mi cartera. Sin embargo unos días después, de compras en un comercio de productos dietéticos, me volví a encontrar con el amaranto. Entre bolsas de productos a granel, en grandes tarros de vidrio se exhibían estas pequeñas semillas.
Grande fue mi sorpresa cuando advertí que el amaranto, según la especie, se presentaba en sociedad con diferentes nombres, todos ellos de origen indígena. Es conocido en náhuatl (México) como huauhtli; en aymará se lo llama tupapa, juirao, linquiñique y en quechua kiuna, kiwicha o achita; en Bolivia es famoso por estar considerado el “arroz andino”.
Ante mis preguntas el vendedor se entusiasmó, me contó los beneficios de estos productos y me entregó unos folletos, casi artesanales, con algunas explicaciones sobre sus cualidades. La publicidad decía que este alimento era ideal para el tratamiento de la anemia, la desnutrición y la prevención de la osteoporosis. En síntesis el amaranto tiene las cualidades de un “supercereal”. Hermosas plantas, pequeñas flores, semillas nutritivas.
Motivada por el discurso apasionado del empleado de la dietética decidí indagar un poco más sistemáticamente. Me enteré que los amarantos (Amaranthus), pertenecen a la familia Amaranthaceae y que existen alrededor de 60 especies, de la cuales más de 50 son oriundas de América.
La palabra amaranto, es un vocablo que deriva del griego y su significado es “inmortal, que no se marchita”, de este modo se hace referencia a que la planta no muere cuando se cosechan sus semillas.
Buscando algunas imágenes de la planta, me asombré al verificar que las famosas “siempre vivas”, que en algún momento habían decorado el jardín de mi casa, eran una de las variedades ornamentales de los amarantos. Pero encontré otras flores que pertenecen a este género botánico, cuyos nombres vulgares son: cresta de gallo, amor seco, madroño del campo, confitillo, siempre eterna, sanguinaria y sempiterna.
Tal como indican sus denominaciones, estas flores no se marchitan fácilmente y duran mucho tiempo después de ser cortadas. Ocurre que la familia de las Amaranthaceae es muy grande. La mayoría de ellas son hierbas o arbustos que pueden alcanzar hasta los 3 metros de altura, aunque también se pueden encontrar algunos árboles y trepadoras. Tienen unas hermosas hojas anchas de diferentes formas en la misma planta (polimorfas) y muestran colores brillantes, donde el verde se combina con el violeta, el anaranjado y el rojo.
Las flores son pequeñas, no tienen pétalos y se presentan solitarias o agrupadas en racimos, espiguillas o panículas; las semillas son muy pequeñas y se encuentra en las inflorescencias; son hermafroditas y generalmente se auto-fertilizan.
Con ánimo de informarme un poco más comencé a buscar noticias y bibliografía. Encontré las primeras respuestas en la Revista Alimentos Argentinos, leyendo la nota “Prometedora resurrección del amaranto” de la Ingeniera Agrónoma Andrea Pantanelli.
Comprobé que la publicidad no era engañosa porque científicamente se afirmaba que “El contenido de proteínas ronda el 15-17% de su peso, sin embargo, su importancia no radica en la cantidad sino en la calidad de la misma, por su excelente balance de aminoácidos. Tiene un contenido importante de lisina, aminoácido esencial en la alimentación humana y que comúnmente es más limitante en otros cereales”.
09 de abril de 2008: mexican living heritage, herencia viva de Mexico. El Amaranto dulce tradicional de la region central de la Republica mexicana. La familia Morales Medina ha desarrollado este producto de manera artesana desde hace siete generaciones. El amaranto es un alimento que ha proveido durante muchas generaciones mexicanas calcio, sonrisas y muchos otros placeres. Realizacion Luis Palomino Benitez, Luis David Palomino Benitez. Fotografia Luis Palomino y Diego Rios «Baby Diego». Diseño sonoro Guillermo Espinosa. Proyecto a cargo de Jorge Alvarez para JM consorcio editorial.
NotimexTV 11 de febrero de 2009: En la feria de La Alegría de Xochimilco …
(8 de febrero de 2010)