Toda la indagación se centra en las cárceles de menores de Cataluña, que son de gestión pública, hecho diferencial del resto de las comunidades, que casi todas son de gestión privada y la realidad de las cuales, tanto con el suministro de psicofármacos como con el maltrato institucional es aún más duro y crudo para l@s xaval@s.
La principal fuente de información son las entrevistas, tanto a educador@s como a xaval@s que han sido encerradas en estas cárceles. También a una psiquiatra que trabaja en la atención primaria a la infancia y a la adolescencia, para dar una perspectiva crítica sobre el suministro de psicofármacos en esta etapa vital. Y a J. Funes, psicólogo que trabaja con adolescentes y exresponsable del área de menores del Síndic de Greuges de Catalunya, por el conocimiento de las cárceles de menores que pudiera tener, aunque se trate de una visión totalmente institucionalizada.
En cuanto a la estructura del dossier, hemos hecho una breve contextualización acerca de la psiquiatría y la industria farmacéutica, ya que la administración de psicofármacos en las cárceles de menores no se podía enfocar como una realidad aislada, sino dentro del auge de la psicofarmacología en la sociedad (la era del prozac).
La industria farmacéutica ha generado la justificación teórica necesaria para legitimar la expansión de los psicofármacos. También hemos hecho una breve referencia al concepto y a la evolución de la idea de encierro, ya que a lo largo de la historia se ha encerrado y maltratado a aquell@s que se salían de la “norma”, inadaptad@s a la lógica dominante …
Consideramos importante, también, situar el contexto actual de la legislación penal de menores [[Legislación consolidada: Ley Orgánica 5/2000, de 12 de enero, reguladora de la responsabilidad penal de los menores, Última actualización publicada en el BOE el 05/12/2006 & Real Decreto 1774/2004, de 30 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de la Ley Orgánica 5/2000, de 12 de enero, reguladora de la responsabilidad penal de los menores, BOE de 30-08-2004.]] y de sus cárceles, para lo que contamos con la colaboración de la Colla Xicalla (muchas gracias) para poder, en definitiva, acercarnos al tema central del dossier. El que se adentra en el proceso por el cual, en las cárceles de menores, much@s de l@s intern@s acaban medicad@s con pautas psicofarmacológicas muy fuertes.
Éste es un trabajo modesto pero hecho con mucha ilusión y rabia, una
investigación que nos ha puesto (y todavía lo hace) los pelos de punta. Elaborado
con ánimo de despertar ganas de mirar más allá e invitar a la reflexión (sobre todo a aquellas personas que se definen como educadoras).
Con mucho cariño a tod@s l@s que habéis estado con nosotr@s y a aquell@s
que no cierran los ojos delante de agresiones y maltratos.
Índice
Introducción 3
Antecedentes: Encierro, psiquiatría e industria farmacéutica 5
Breve descripción de los tipos de psicofármacos 6
Contextualización de la ley penal 5/00 y las cárceles de menores 12
Marco jurídico e institucional 23
Qué está pasando en las cárceles de menores con el suministro de psicofármacos? 33
Conclusiones 42
Anexo: El niño hiperactivo 54
Bibliografía 76
Anexo
El niño hiperactivo
Érase una vez, un aumento de la euforia médica. Los Dioses que juegan con los cuerpos, los médicos, lo hacen también con las mentes. La mente como parte de un cuerpo.
– “Exploración Neurofisiológica. Test neurológico rápido”, importantes técnicas en la evaluación de la hiperactividad, las utilizaremos con G, señora no se preocupe, la ayudaremos, contamos con gran variedad de psicoestimulantes, buenos fármacos, eficientes. No se preocupe.
Un cuerpo, ese, el hiperactivo, que sólo responde y funciona bien cuando lo estimulamos, porque así se pueden frenar los actos impulsivos, los gritos, los movimientos repetidos y frecuentes de piernas y brazos, de dedos, de manos. Frenar un cuerpo que nació para estar alerta.
? Señora no se preocupe para la evaluación de G, utilizaremos un “podómetro”, también un “actómetro”, todo ello nos dará información sobre el movimiento de su niño, no se preocupe la ayudaremos.
Un cuerpo que no acepta la disciplina, el método, el orden cronometrado de las cosas, la costumbre, el sedentarismo. Un cuerpo que, tal vez, ya no es cuerpo, ya No-Humano. (Humano, na: perteneciente al hombre, propio de él).
Su casa pequeña, su habitación pequeña, su entorno huele mal, hay humo, hay prisas, hay tele, hay cosas que leer, mucha información, más desinformación, Dioses doctrinales que dejan llorar a los niños hasta que quedan ahogados por su llanto. Aquí vive G, una cría de humanos.
Un día, cuándo el cuerpo (donde también entra la mente), el nacido humano, llega a imponerse, cuando habla mucho, cuando corre más, se mueve, siente hasta las uñas de los pies, la savia de la vida que le fluye, quiere volar y vuela.
? Te vas a caer, deja eso quieto, no corras, siéntate, anda, estate quistecito, No, no podemos volar. Porque no y punto. !Sal de ahí! Y mira el Rey León una ratito, anda, la mamá está cansada.
Pero el dios doctrinal dice a este respecto:
? Tranquilícese señora, no lo hará, sólo déle este nuevo fármaco, Ritalin. Su cuerpo no se volverá a imponer, vamos a por una parte, la trataremos, somos psicólogos, psicopedagógos, psiquiatras. Burgueses amantes del control, del autocontrol, de la independencia emocional, del triunfo de la parte, la mente, sobre el todo, el cuerpo.
? Sólo una dosis al día, bueno, ahora que es el principio, que está muy nervioso. Ustedes …su marido y usted, digo, no están casados verdad, …vivieron juntos, pero ya no, ¿es cierto? Es importante saber cual es su entorno familiar. Otra peguntita, dígame ¿qué hace G cuando le dice que vaya a dormir solo?
La señora, la mamá de G, piensa, calla. Pues en realidad, hay noches que es ella la que no quiere dormir sola, duerme con G, le habla y se duerme. “Es como mi brazo, mi pierna, soy yo quien se calma”, piensa la señora.
? La mamá llora, quiero consolarla. Solo grita, me grita, no me escucha, no me mira, no me ve. Dice G a la mancha de la pared, la que tiene forma de oreja.
Otra oportunidad, volver a nacer, rehacer el todo, para esto debe morir mi parte, mi mente. Solo la muerte me salvará. Mala mente la mía. Mala vida la mía …
La “coca de los peques”, así hablaba del Ritalin un artículo que hablaba del suministro de anfetaminas y sus derivados. Informan que el metilfenidato está emparentado químicamente con las anfetaminas y funcionalmente con la cocaína. Asusta pensar que, la ONU, esa institución que vela por los derechos humanos, observa que la utilización con fines médicos de estos derivados, ha aumentado de forma descomunal. De esta forma el Ritalin se ha convertido en el fármaco predilecto de los Dioses y sus mercaderes, aquellos que comercian de forma legal con las anfetaminas. Hoy en día, dicen, casi 6 millones de niños están bajo control de este fármaco. Los efectos secundarios de este fármaco, de esta maravilla de la ciencia, que ayuda a los niños de los países industrializados, a los blanquitos, a vivir
mejor, tiene unos efectos sobre el sistema nervioso central que son entre otros: llanto fácil, confusión cefalea, depresión psicótica, …
Ahoga pensar, pensar en los niños que no serán nunca Humanos, que serán diagnosticados de una enfermedad que ni siquiera se asegura que lo sea (tal vez en sentido figurado).
(Enfermedad f: pérdida de la salud, alteración más o menos grave del equilibrio orgánico. Fig.: Pasión dañosa o alteración en lo moral o espiritual).
Todo cuanto se lee sobre esta enfermedad parece especulativo, sus causas, su tratamiento, su diagnóstico, su consideración social, todo. Asusta pensar que aún así, sustancias como el metilfenidato, están en los cuerpos de las crías, ya no-humanas. Asusta. En algunos países han decidido que en las cajetillas de los medicamentos se indique que las tendencias suicidas, son bastante comunes, en la utilización de estos fármacos para los hiperactivos.
Mientras, en los cielos de los rascacielos de la gran ciudad … Los Dioses, han decidido callarlos, sin poder aplastar sus cuerpos, piensan, solo queda una forma. Sólo si la parte domina el Todo, y si nosotros dominamos la parte. Frenar sus deseos, su creatividad desmesurada, que no sean niños, que no sean humanos, mejor, tanta creatividad siempre fue un obstáculo, se piensa, se escribe, se siente, y todo esto sin control, no lo podemos permitir. Todo esto queda consensuado en “comité ejecutivo” entre los mercaderes y los dioses, desde que descubrieron que los humanos, los hiperactivos, eran bastante inteligentes, genios, grandes pintores de la historia, escritores, premios Nóbel, … Así se decide controlar, canalizar toda
esta eficiencia humana, en pos de la productividad y el dinero de la adicción a las drogas.
Dosis justas para desear la muerte a los 24, si la parte empezó a dominar el todo a los 12. Desear la muerte a los 16, si todo empezó a los 6, desear la muerte, … No más vida. Un arma, mata.
G no puede más. Se acabó.
Esto es sólo un cuento, solo una historia.
Gerard muere con 17 años.
De una Fo
(16 de julio de 2012)