Mono choro cola amarilla en peligro de extinción (Fotografía: Fanny M. Cornejo)
El reporte revela que cerca de la mitad de especies de primates están en peligro de extinción por la destrucción de los bosques tropicales, el comercio ilegal de especies silvestres y la caza comercial de carne de animales silvestres.
La lista de estos 25 primates que requieren urgentes medidas y acciones de conservación está integrada por: 5 especies de Madagascar, 6 de África, 11 de Asia y 3 de América del Sur (Colombia, Venezuela y Perú).
El informe alerta al mundo sobre el inmenso peligro que enfrentan estos primates, que se encuentran entre los grupos de vertebrados más amenazados, y hace un llamado para ayudar a salvar a estas especies a fin de evitar su extinción para siempre.
El Dr. Russell Mittermeier, Presidente del Grupo de Especialistas en Primates de la Comisión de Supervivencia de Especies de la UICN y Presidente de CI dice que “El propósito de nuestra lista de 25 especies más amenazadas es resaltar la situación de aquellas que enfrentan un riesgo mayor, para atraer la atención del público, estimular a los gobiernos nacionales para que realicen más acciones de conservación y especialmente obtener recursos para este fin. Queremos que los gobiernos se comprometan a promover medidas de conservación cuando se reúnan en Japón, en Octubre. Tenemos los recursos para enfrentar esta crisis, pero hasta el momento hemos fallado”.
Las especies sudamericanas incluidas en la lista son: el Mono tití cabeza de algodón, el Mono araña de Magdalena y el Mono choro cola amarilla. Este último es una especie endémica del Perú, de los bosques de nubes de Amazonas y San Martín, y actualmente está siendo estudiada por Fanny M. Cornejo, la misma que tuvo a su cargo la sustentación científica del por qué este mono debe estar incluido en la lista de los 25 primates más amenazados del mundo en el 22 Congreso de la Sociedad Internacional de Primatología en Agosto del 2008 en Edimburgo.
F.M. Cornejo indica que el mono choro de cola amarilla está restringido a una pequeña área de los Andes Tropicales y que persiste sólo en bosque primario premontano, montano y bosque de nubes entre 1.500 y 2.700 metros sobre el nivel del mar. No hay estimados actuales de las poblaciones remanentes, y la deforestación indiscriminada del bosque de nubes primario es la principal amenaza para esta especie, su hábitat ha sido enormemente deforestado, resultando en un paisaje fuertemente fragmentado.
Se conoce que el Mono choro cola amarilla está presente en el Parque Nacional Río Abiseo (PNRA), el Bosque de Protección Alto Mayo (BPAM) y la Zona Reservada Cordillera de Colan (ZRCC), sin embargo, más de 6.000 hectáreas de bosque primario fueron deforestadas dentro del BPAM, y junto con la ZRCC sufren de tala ilegal selectiva, por otro lado la ZRCC tuvo dos concesiones mineras operativas cerca de sus límites, y ambas tienen la constante amenaza de una irregular migración humana.
Hay poca información sobre la biología y la historia natural de este importante mono peruano, debido principalmente a las dificultades impuestas por el terreno montañoso y las precipitaciones en los bosques en donde vive. Un estudio completo sobre el rango y la ampliación de su hábitat en estos bosques es urgente y necesario para desarrollar planes para proteger las poblaciones remanentes, los estudios deberían también incluir investigación de genética de poblaciones para examinar la variabilidad y la viabilidad de las poblaciones existentes.
Actualmente, varias organizaciones están invirtiendo esfuerzos y recursos en los bosques del noreste del Perú donde es el hábitat del mono choro cola amarilla, una de ellas es Yunkawasi que esta desarrollando el Programa de Educación Ambiental orientado a la Conservación de los primates Peruanos.
Aun cuando los esfuerzos realizados por las diversas organizaciones están dando resultados positivos, no son suficientes, ya que aun las regiones de Amazonas y San Martin presentan el mayor índice de deforestación del Perú y existen conflictos sociales con los madereros ilegales y los traficantes de terrenos.
Finalmente, el reporte indica que se deben implementar urgentes iniciativas de conservación del mono choro cola amarilla, proteger los bosques que son su hábitat, promover la creación de un corredor biológico; control de la tala ilegal y del tráfico de tierras; la disposición de un modelo alternativo económico de las comunidades locales que viven a lo largo de las zonas de amortiguamiento, a fin de prevenir futuras migraciones hacia los bosques nublados primarios; y la implementación de un fuerte plan de conservación y educación.
Queda en manos de las autoridades peruanas y sus pobladores lograr que nuestro famoso mono pueda sobrevivir, la alerta ya esta dada.
* Fanny Fernández Melo es ingeniero y miembro del Comité Técnico del Foro Ecológico del Perú y del Comité Técnico de la Red Nacional de Educación Ambiental.